¡Buenos días!
¡Qué alegría celebrar este día tan especial con todos ustedes!
Quiero agradecer a la Directora Daria Noguera, a los profesores, a los padres y, por supuesto, a los talentosos alumnos de esta escuela. También dar reconocimiento a los funcionarios locales aquí presentes y su importante trabajo, porque la labor principal de los dirigentes que han sido elegidos democráticamente es conocer y responder a las necesidades de las comunidades a las que sirven. Gracias por la cálida bienvenida, y felicitaciones a los estudiantes por sus impresionantes presentaciones.
Hoy, en el Departamento de Presidente Rutherford B. Hayes – o I-yes, como decimos en español – en Villa Hayes, en la Escuela Básica Presidente Rutherford B. Hayes, conmemoramos las acciones del Presidente Hayes y Benjamín Aceval en su trabajo de establecer las fronteras del Paraguay moderno.
Los Estados Unidos y Paraguay han tenido, y continúan, una fuerte y duradera amistad.
Así como el Presidente Hayes ayudó a mantener las fronteras establecidas de este gran país, estoy aquí para decirles que Estados Unidos continuará siendo un socio para apoyar al Paraguay en alcanzar su potencial.
El mejor lugar para empezar es aquí mismo, en sus aulas.
En escuelas como ésta, en todo el país, se construye el futuro paraguayo. Ustedes están construyendo las habilidades que utilizarán en el sector privado o en el servicio público – como médicos, o maestros, o ingenieros, o artistas, o diplomáticos – haciendo crecer la economía de Paraguay y ayudando a otros paraguayos a vivir vidas más sanas, más felices y seguras. El futuro está en sus manos.
Es un honor hacer esta donación en nombre de los Estados Unidos como una inversión en la educación para construir el futuro de Paraguay. Y me enorgullece hacerlo en una escuela, una ciudad, y un Departamento que honra a un Presidente estadounidense.
Estudiantes, estoy esperanzado en ver las cosas maravillosas que realizarán para hacer el Paraguay – y nuestro mundo – un lugar mejor. Celebro el futuro que ustedes crearán. Muchas gracias.